SIN-SOLO

Susurró en sus ojos: su último llanto,
Caminó descalzo: piel con piel,
Robó sus besos: labio a labio,
Deseos de un hombre: él.

Soñó despierto: su gran milagro,
Yació dormido: silencio fiel,
Luchó desnudo: puño con puño,
Deseos de un hombre: él.

Voló atado: plumas de barro,
Temió ser herido: con puñal de alfiler,
Sin-solo: el hombre querido,
Deseo cumplido: con él.

Amistad

A veces es mejor no apagar la luz

y mantenerse despiertos,

Ver pasar y pasar las horas del maldito reloj,

Contar cada segundo del minuto que transcurre,

Que se lleva una parte de nuestra vida,

Y nos arrastra hacia donde las almas sollozan,

Piden clemencia y suplican,

Lloran, gritan y nos ruegan:

¡Disfrutad de vuestra vida, hay que ser feliz!

No merece la pena estar atormentado,

Confundido o destrozado,

Las cosas pasan, y pasan con y sin motivo,

Dejan huella en la húmeda tierra,

Húmeda por los llantos caídos,

Por las horas perdidas,

Por los segundos de cada minuto

Que pensaste en él y no dijiste

Lo que tú de verdad sentías.

Ahogando tus malos días en pozos

oscuros sin fondo, sin cuerda

que pudiera sostener el cubo

con el que poder salvar lo que queda

de tu vida tras comprender, que,

Si no estamos hechos el uno para el otro,

No hay más motivo de ser:

Simples y estúpidos idiotas,

Empedernidos, felices a más no poder,

Tú me picas, yo te pico,

Somos así, ¿no lo ves?

Espero que las cosas nunca cambien,

Que sean como hasta ahora, especiales,

Pues somos dos personas

con distinto destino,

¿Unidos?, nunca se sabe,

Pero sí sumergidas en la mejor

Y nunca jamás superable e inseparable:

AMISTAD.  

Review

JAQUE MATE, FINAL.

Vivo un sin vivir,
Escuchando tu mirada,
Palpando tu susurro,
Sintiendo tú caminar.

Sueño con un futuro,
Respiro en nuestro pasado,
Lágrimas sobre tu cara,
tentación, difícil de superar.

Tu luz y pasión
me alertan de tu presencia,
Frío verano,
Agazapado junto a ti.

Escalofríos sobre mi piel,
Voz de olas de mar,
Mirada, yo de nuevo feliz,
Despedida crucial.

Dulce partida ganada,
Yo perdida, por no saber apreciar,
Las tablas no se remontan,
Jaque mate, final.

Mi capitán.

Necio y fugaz aventurero,
obrador de sueños, de paz,
pandillero y maestro de hazañas,
cantado y sonado, leal.

Inquietante y veraz telonero,
almirante pesquero ¡A la mar!
Sencillo y fiel compañero,
elocuente y tenaz "D'Artagnan".

Liviano de puerto y bandera,
luchador de batallas, ganar,
ruega por nosotros, tesoro,
protégenos ¡MI CAPITÁN!

Flechas.

Flechas


Jugando con lo más efímero que un niño,
solitario y perdido en la nada, cambiaría
por el más mínimo tesoro.
¡Dolor de fantasía!


Agua sin serlo traspasa lo más oscuro
que los, nunca olvidados sueños
pudieron recordar aquella triste pero no perdida vida, lo que es.
¡Dolor de fantasía!


Cálido cántico el de una voz tenue,
y tupida,
con melodía desprendida de graves y agudos estrepitosos, que ¡oh de mí!
¡Dolor de fantasía!


Luz al final del túnel lejano deslumbrado
y, disgregado en dos rayos cargados
de energía, que como flechas me atraviesan.
¡Dolor de fantasía!

De leve perdición...

Sin motivo alguno,
Leve fue mi perdición.

Que dos mas dos son uno,
Mira atrás, a tu alrededor.

Cantando primaveras
Como corre el agua por el salón.

Deslumbrando tu mis penas,
Sonríe, llora, huye... ADIÓS.

Desconcertado...

Capa Caída, Triste Tu Luna...


¿Porqué no sale a volar,
tu mirada sobre mi cuna,
en un vaivén que me marea?


Capa caída, triste tu luna.


Son demasiadas primaveras,
encerrado en los baúles,
de los soles mis luces,
mi dolor me desespera.


Al caer como dos rayos,
mil centellas de tus labios,
marean las mías ideas,
enturbian mi perdición.


Que al seguir tu carro alado,
tras el fantasma de tu blancura,
crea en mi, tu dulzura,
un sabor a ansia de más.


Pues era mar calmado,
y ahora frío y bravo persiste,
pues el llanto que te perdiste,
vuela aún, desconcertado.

Volver a resurgir...

Rumbo Perdido...


Volver a nacer de entre
las cenizas,
donde todo lo oscuro
ilumina corazón.


Caminar sin destino
el que fuera,
ojos claros perdidos
del lúcido señor.


Como agua que corre
por el río,
discurre a lo largo
del canal.


De sol en sol el
desafío,
de perder el rumbo
de mi soledad.

Caballeros De Ojalá...

Caballeros De Ojalá...

Los recuerdos encontrados,

en lo más profundo de mí caminar,

risas como escarpias doloridas,

vientos que acaban de escapar.

De lo más profundo de mi alma,

hacia un lugar donde acabarán,

hechos trizas y transformados,

en caballeros de ojalá.

Porque nunca se sabe el destino,

de todo aquel que por vencido,

es prudente ante un sentimiento,

inferior o superior a sus penas.

Pues al caminar lento y abatido,

las risas, los vientos, entristecidos,

las noches rotas en un solo segundo,

reflejan en mi sombra una luz.

Que ilumina nuestro camino,

la bruma que nos acecha,

nos perturba y nubla las ideas,

nos cambia y transforma en inmortales.

Estado, en el que nuestra dura vida,

en la que todo el tiempo decida,

sobre las lluvias y caídas mundanales,

en el que no será posible la huida.

¡Despiértame ya!

¡Despiértame ya!

Aquesta nuestra espera,

Que no es peor tarea,

Sino gran desilusión.

Pues esto de inventar,

No es mayor tesoro

Que el de tú y yo.

Conmocionado y exaltado,

Yo no me encuentro,

No se interpretar.

Todo lo que ha pasado,

Lo que ha ocurrido,

¡Despiértame ya!

Busco en la profundidad,

De todo camino,

De todo lugar.

No encuentro nada,

Solo hay vacio,

Triste oscuridad.

Sueño tras sueño perdido,

Noche tras noche encontrada,

Necesita llegar.

A lo jamás aprendido,

Lo nunca observado,

¡Despiértame ya!

Que Callen...

Que callen aquellos que nos dicen...

Que callen aquellos que nos dicen,

Que lo más preciado de nuestra vida,

Los que nunca jamás se nos olvida,

Es lo que siempre todos nos maldicen.

Porque tu sonrisa  provoca un bien,

Tus serenos labios una avenida,

Que junto al roce de tu piel abatida,

Desprenden chispas que nos comprometen.

Al decir que poesía es un tesoro,

Al decir que tu mirada un arte,

Que nuestros versos libres son talantes.

Porque el calor desprendido sonoro,

De los versos que nunca encontraste,

Mueven mil lunas de besos flamantes.

Mi sombra y tú...

Mi sombra y tú - ùt y arbmos iM

Con los ojos vendados

Y quemados por mirar,

Con lágrimas de fuego

Que arden sin más pesar,

Porque esta era nuestra historia,

Distinta y rara, pero de nadie más.

Con las manos envueltas

Con las vendas de mi palpitar,

Y tú ilustre rostro que florece

Con mi alma, mi yo, mi caminar,

Pétalos sobre tus piernas,

Ola de nubes, mar de mar.

Brazo, pierna y mente,

Obstruidos por una noción,

Que inunda cuerpo y cielo,

Vuelan a ras del suelo,

Planean sobre mí sombra,

Efímera y ligera, una ilusión.

Esperando lo inesperado,

Virtud, suerte y consternado,

Lo que no puedo esconder,

Tengo que entenderlo,

Necesito irme ya,

Espera, tú, quédate a mi lado.

Ni Tú, Ni ...

Ni Tú, Ni Yo...

Lenguas de fuego que resplandecen,

Sobre el cielo oscuro de mi cuidad,

Todo ardiendo, la casa en llamas,

Mi mente, mi alma, mi divinidad.

Porque una imagen vale

Menos que mil palabras,

Y tú mirada una sonrisa,

Un sentimiento, una misión.

Caminantes no hay camino,

Sin amantes no hay amor,

Sin tus besos no hay locura,

Sin tu cabello mi perdición.

Porque lo que más duele al alma,

Es la tristeza del nuevo día,

En el que las cenizas como escombros,

Sepultan la noche de trizas.

Con el soplo de tu voz,

Y el viento de mi pavor,

Con la dulzura de tus caricias,

Y el amargo de mi yo.

Con un espérame mañana,

Con un minuto más junto a mí,

Con un nunca te olvidaré mi hada,

Me despido de ti.

Vacío...

Vacío...

Tiemblo, suspiro  y respiro,

Sentado, te miro, admiro,

Lo que mis ojos ven sin sentido,

Tu luz, mi yo, mi merecido.

Escucho, comprendo e intranquilo,

Me caigo, me tumbo y titilo,

Lo que mis oídos escuchan, aullido,

Tu voz, mi voz, abatido.

Camino, comprendo y merezco,

Herido y doloroso, adolezco,

Tú ayuda, tu mano, tu tú,

Mi yo, mi querer, me supera.

Abatido, perdido y fustigado,

Moribundo, desamparado y mutilado,

De amor en llamas, consumido,

Retardado, vencido y perdido.

Oscurece La Paz...

Productos De La Humanidad...

Nunca duele más el alma,

que cuando desde la nube de tu mente

llueve, y la tormenta de tus miradas,

provocan tristeza y desilusión.

Vientos de componente norte,

deslumbran las locuras de todo ser,

que la mano del hombre puede hacer,

que tu yo y mi tu, vuelven a nacer.

Satisfacer los deseos de los hombres,

añorar las risas de los niños,

endulzar los sentimientos que afloran,

y que de amargura florecen al Sol.

Porque la luz que ilumina nuestro camino,

oscurece la paz y la igualdad,

productos de una sola guerra,

productos de la humanidad.

Séptimo Arte

Séptimo Arte

Baile de flores, noche de trizas,

y tú, agarrada, junto a mí, de mi mano,

te separas, te evades, me hipnotizas.

Porque el alma solo aflora,
cuando de tu sonrisa, plácida y clara,

vuelan pájaros que se transforman,

en verdaderas emociones,

que me provocan sobre ti, deseos.

Vuelve hacia donde el Sol nace,

para que las nubes del cielo,

junto a los vientos alisios,

bailen al compás de tu cuerpo,

al igual que los álamos del rio,

mueven sus hojas con sólo el soplo

de tu voz.

Allá donde todo es de oro,

dónde los lobos aúllan, tesoro,

de tu cuerpo fugaz e infinito,

de tu alma pura y cálida,

donde cielo y mar convergen,

donde las estrellas nos protegen,

allí la Luna nos cobija,

nos convierte en cenizas.

Besos de pasión entre tus labios,

séptimo arte, ya todo es pasado,

música de espanto, cantos de odio,

no sé por qué la llama se ha apagado,

temo perderte, pájaro alado,

luz de mi alma, me intranquilas.

La guerra ha comenzado,

armas de flores, rosas de cielo,

dispárame, porque sin ti me muero,

porque sin ti no florezco, y

lloraré con solo creer,

que mi luz ya se apaga,

me consumo en un mar de llamas,

herido, en noche de plata.

Soneto II

Claro De Luna…

Nada cuenta cuando sabes apreciar,

Piensa en futuro, recuerda en pasado,

Mírame cerca, esto es un atentado,

Claro de luna, triste en mí caminar.

Cálido el cielo azul, fugaz de soñar,

Sube a la nube, estoy acelerado,

Dame un beso, o soy atropellado,

Sonríe, respira y vuelve a volar.

Pensado para una tarde caliente,

Rayos de luces, juegos en mente,

Salimos juntos, mi filosofía aflora.

Lluvia de gozo, fría y demente,

Días de nada, días de sol naciente,

Nunca es fácil ser motivo de agora.

Soneto I

Tiempos De Guerra, Tiempos De Paz…

Ante todo y por todo la paciencia,

Divergencia sin más que escuchar,

Afectiva en cualquiera de estos lugar,

Cielo y tierra mueren por su inconsciencia.

Adornada de paz, deseos e inexperiencia,

Que  cualquiera sepa de ésta apreciar,

Ondas de pecho que suenan a mar,

Mueren las tristes flores de insuficiencia.

Escucha la canción de nunca jamás,

Incolora, sucia y triste conmoción,

Sueños de amor, sueños de paz.

La elocuencia es la más obsesión,

Ninguno sabrá que hicieron los demás,

Tiempos de guerra, tiempos de paz.

Nota a Nota...

Poesía...

Nota a nota, la sinfonía,

De la Luna, me intranquila,

Verso a verso, la agonía,

De saber dónde tú yaces.

Poesía.

A cuatro manos, do de pecho,

Clara luz que me transforma,

Tierna flor de mil mañanas,

Sol alado ya todo es nada.

Poesía.

Ramas infinitas de deseo,

Nubes de oscuridad a lo lejos,

Agua de mar, ya nada me calma,

Todo duele menos el alma.

Poesía.

Baile a baile, me adormeces,

Gusto a gusto, me enloqueces,

Mirada triste, está por llegar,

Sueños abrumados por tempestad.

Poesía.

Rayo a rayo, tú me enfilas,

Beso a beso, me hipnotizas,

Yo me arrastro por tus espaldas,

Tú me conviertes en cenizas.

Poesía.

Sin-Sentido...

Locura...

Tardío y solitario cancionero,

Odas de revuelo corazón,

Duelos de ilustres caballeros,

Obcecado en el amor.

Entre tanto y nunca nada,

Sueños de todo, sueños de hada,

Maldecido por una hechicera,

Anterior a tú y yo, alada.

Señorío y tembloroso lugar,

Sintiendo y desmiento a la vez,

Educado y bien vestido, vuestra merced,

Nunca en vano, siempre hay sed.

Corazoncillo de primavera,

Ilustrado en una doncella,

Limpiabotas del mañana,

La, do, mi, himno de guerra.

Ondas de agua sobre mi piel,

Duendes de oro por el pastel,

Melodías al anochecer,

Lindas mariposas, desdichado corcel.

Odios de leyenda, amor inmortal,

“Te quieros” de una tierra, cosecha natural,

Unidos por las manos, tu y yo jamás,

Entre tanta tontería, cielos de adversidad.